LOS CALVINISTAS ENSEÑAN QUE LA REGENERACION PRECEDE A LA FE


El pasaje principal acerca del Nuevo Nacimiento es Juan 3. En los versículos 1-8Jesús le enseña a Nicodemo de que él debía nacer de nuevo, o no podría ver el reino de Dios. En el versículo 9, Nicodemo le pregunta a Jesús cómo puede ser esto. En los versículos 10-21, Jesús responde a esta pregunta y explica cómo un hombre nace de nuevo, ¡y la respuesta es que nace de nuevo por creer! (Jn. 3:14-16).Esto es exactamente lo que los calvinistas dicen que el pecador no puede hacer. ¿Cómo puede un hombre muerto creer?, razonan.Bueno, si vamos a tomar la analogía del "hombre muerto" literalmente, un hombre muerto tampoco puede pecar. Efe_2:1  Y él os dio vida a vosotros, cuando estabais muertos en vuestros delitos y pecados, 
Cuando la Biblia dice que el pecador está muerto en delitos y pecados significa que está separado de la vida divina de Diosdebido al pecado. Llevar esta analogíamás allá de la enseñanza real de la Biblia y darle "otros significado"s, como razonar que dado que el pecador está muerto en delitos y pecados no debe ser capaz de creer, es pasar de la verdad a la herejía.
La doctrina de la total depravación del hombre ha sido distorsionada por los Calvinistas extremos, lo cual ha resultado en un entendimiento equivocado de la incapacidad del hombre. 
El carcelero Filipense preguntó en una oportunidad, ¿QUÉ DEBO HACER PARA SER SALVO? (Hechos 16:30-31 y comparar Hechos 2:37-38). Algunos Calvinistas extremos, si hubiesen estado en el lugar de Pablo,  habrían respondido como sigue: ¿Qué tienes que hacer para ser salvo? ¡Nada! ¡Absolutamente nada! ¡Tú estás espiritualmente MUERTO y eres totalmente incapaz de responder a Dios hasta que seas regenerado!
Los Calvinistas extremos enseñan que la regeneración tiene que preceder a la fe y que una persona tiene que nacer de nuevo antes de que pueda creerEllos dirían que una persona tiene que tener vida eterna antes de que pueda creer, porque una persona que está muerta en pecados es incapaz de creer. Ellos enseñan la fe sin regeneración es imposible. Tal enseñanza les parece lógica y razonable basados en el sistema teológico que han adoptado. Pero, “¿QUÉ DICEN LAS ESCRITURAS?
La Biblia enseña claramente lo siguiente: ¡CREE Y SERÁS SALVO! “De cierto, de cierto os digo: El que cree en Mí, tiene vida eterna” (Juan 6:47). “Para que todo aquel que en ÉL cree, no se pierda, mas tenga vida eterna” (Juan 3:15)El Calvinista extremo dice, “¡VIVE Y CREERÁS!” Ruego notar que Juan 1:12 NO dice esto: “Pero a todos los que han sido regenerados, a ellos les dio poder para creer en Su Nombre, y ser hechos hijos de Dios.” 
SI DICE: Jua 1:12  Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios; 

Note también que Juan 20:31 dice, “para que creyendo, tengáis vida en Su Nombre”. No dice, “para que teniendo vida, podáis creer”. En su condición desvalida y sin esperanza, al pecador se le dice que MIRE al Señor Jesucristo Y VIVA (Juan 3:14-16). (Cantamos el himno “mira a Cristo y vivirás”. El Calvinista extremo debería cambiar las palabras a “VIVE Y MIRA”).
Asumamos por un momento que lo que dice el Calvinista extremo es verdad. Si la regeneración precede a la fe, entonces ¿que tiene que hacer el pecador para ser regenerado? El Calvinista extremo nunca ha respondido satisfactoriamente a esto. La respuesta de Shedd es típica: Puesto que el pecador no puede creer, él es instruido a cumplir con los siguientes deberes: (1) Leer y escuchar la Palabra divina. (2) Aplicar seriamente la mente a la verdad. (3) Orar por el don del Espíritu Santo para convicción y regeneración. (W.G.T. Shedd, Dogmatic Theology).
La respuesta de Roy Aldrich a ésto es incisiva: “Una doctrina de total depravación que excluye la posibilidad de la fe también tiene que excluir la posibilidad de “oír la palabra”, “dedicarse seriamente a la verdad divina” y “orar por el Espíritu Santo para convicción y regeneración”.
La tragedia de esta posición es que pervierte el evangelio. Al pecador se le dice que la condición para ser salvo es la oración en vez de la fe. Cuán contrario es ésto a Hechos 16:31. Al pecador no se le dice que ore por convicción y regeneración. Al pecador se le dice que crea en el Señor Jesucristo.

Jua 15:16 No me elegisteis vosotros a mí, sino que yo os elegí a vosotros



Jua 15:16 No me elegisteis vosotros a mí, sino que yo os elegí a vosotros

Este pequeño fragmento del Libro de Juan sirvió como”base de apoyo” para reafirmar la postura calvinista de la”predestinancion” o “eleccion”por parte de Dios,a unos cuantos “escogidos” y no a cualquier ser humano  que a traves de la predicación del evangelio que es Rom 1:16 poder de Dios para salvación a TODO aquel que cree.
Suena muy agradable a nuestra carne"sentirnos elegidos o escogidos" por Dios,pero Si analizamos el contexto no se está refiriendo a la”eleccion calvinista”,sino a la eleccion de los doce apostoles :
El contexto comienza en el capitulo 13

Jua 13:1 Antes de la fiesta de la pascua, sabiendo Jesús que su hora había llegado para que pasase de este mundo al Padre, como había amado a los suyos(discipulos) que estaban en el mundo, los amó hasta el fin.
Jua 13:18 No hablo de todos vosotros; yo sé a quienes he elegido; mas para que se cumpla la Escritura: El que come pan conmigo, levantó contra mí su calcañar.
Jua 14:2 En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros.


En el capitulo 15 Jesus comienza a ilustrar a traves representación de la Vid y los pámpanos y en ese contexto evoca la “elección” que hizo de ellos para el apostolado:

Jua 15:16 No me elegisteis vosotros a mí, sino que yo os elegí a vosotros

Un termino similar utilizó en Jua 6:70 Jesús les respondió: ¿No os he escogido yo a vosotros los doce, y uno de vosotros es diablo?

Como vemos directamente se refiere no a la predestinación calvinista, sino a la elección, “vocación,” al apostolado, que les hizo al llamarlos a cada uno en su día .
La finalidad de esta elección es para que “vayáis.” El sentido es: a seguir su camino; es la misión de “apóstoles”; ni se pone término geográfico a su “misión”: “deis mucho fruto” de apostolado, como lo pide el contexto. Es la vocación a la santidad antes dicha. Y es a lo que lleva la sección siguiente, en que habla de las persecuciones que tendrán por causa de él.
“Y vuestro fruto permanezca,” es decir, el fruto de su apostolado que sea de una eficacia permanente allá donde ellos arrojen la simiente.


Cuatro capitulos mas adelante dice lo siguiente:

Jua 17:8 porque las palabras que me diste, les he dado; y ELLOS LAS RECIBIERON, y han conocido verdaderamente que salí de ti, y HAN CREÍDO que tú me enviaste.
Jua 17:9 Yo ruego por ellos; no ruego por el mundo, sino por los que me diste; porque tuyos son,
Jua 17:10 y todo lo mío es tuyo, y lo tuyo mío; y he sido glorificado en ellos.
Jua 17:11 Y ya no estoy en el mundo; mas éstos están en el mundo, y yo voy a ti. Padre santo, a los que me has dado, guárdalos en tu nombre, para que sean uno, así como nosotros.
Jua 17:12 Cuando estaba con ellos en el mundo, yo los guardaba en tu nombre; a los que me diste, yo los guardé, y ninguno de ellos se perdió, sino el hijo de perdición, para que la Escritura se cumpliese.

COMO VEN JESUS SE ESTABA REFIRIENDO EN TODO MOMENTO A SUS DOCE DISCIPULOS,SUS DOCE ESCOGIDOS.
Jua 17:20 Mas no ruego solamente por éstos, sino también por los que han de creer en mí por la palabra de ellos,
AQUÍ RECIEN ENTRAMOS EN ESCENA TODOS NOSOTROS,LOS QUE “CREEMOS” POR LA PREDICACION DEL EVANGELIO (NO POR SER ELEGIDOS O ESCOGIDOS)

Y unos versiculos mas adelante dice:

Jua 18:1 Habiendo dicho Jesús estas cosas, salió con sus discípulos al otro lado del torrente de Cedrón, donde había un huerto, en el cual entró con sus discípulos.
Ud habrá notado la diferencia cuando se estaba refiriendo a sus discipulos en especial y cuando lo hizo referido a nosotros,los que creemos a traves de la predicación del evangelio.
No nos olvidemos que Juan Calvino recibio como referente la enseñanza de la predestinacion de parte de Agustin de Hipona proveniente del MAQUINEISMO GNOSTICO y (padre de las doctrinas catolicas,creador de la doctina del purgatorio y el bautismo de los recien nacidos entre otras) y que Martin Lutero era un monje "Agustiniano",por eso tanto calvino como Martin Lutero comparten la doctrina de la predestinacion.
Muchos equivocadamente ven en Martin Lutero un ejemplo a seguir,pero el lo UNICO bueno que hizo fue simplemente denunciar la venta de indulgencias por parte de la iglesia de roma.
Tampoco la postura de Jacobo Arminio es la que un cristiano debe seguir,sino las enseñanzas de nuestro Maestro : Jesucristo.
Jua 14:6  Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.
Hoy los cristianos que adquirieron la doctrina de la predestinacion,tienen que recurrir a literaturas de Charles Spurgeon ,George whitefield,Jonathan Eduards,Martin Lutero,John Huss,john wyclif,John McArthur,Paul Washer,etc .entre otros referentes calvinistas para intentar comprender esa falsa doctrina.

LOS CRISTIANOS SOLO NOS GUIAMOS POR LO QUE ENSEÑABA PABLO,PEDRO,JUAN,ESTEBAN,ETC. POR EVANGELIO PURO DE CRISTO,NO POR FABULAS Y DOCTRINAS DE HOMBRES.

(2Pe 1:19) Tenemos también la palabra profética más segura, a la cual hacéis bien en estar atentos como a una antorcha que alumbra
en lugar oscuro
(2Ti 3:15-17) y que desde la niñez has sabido las Sagradas Escrituras, las cuales te pueden hacer sabio para la salvación por la fe que es en Cristo Jesús.
Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia,
a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra.

“Calvinismo: Una Falsa Representación de Dios”


(extracto del libro de Dave Hunt titulado : “¿Qué Amor es Éste? “Calvinismo: Una Falsa Representación de Dios”). 
“¿Por qué Dios desperdicia Su tiempo y esfuerzo y el tiempo y el esfuerzo de Sus muchos profetas suplicando a aquellos que, supuestamente, no pueden oírlo y que, aun si pudieran, siendo totalmente depravados, nunca responderían a Su petición al creerle y obedecerle? ¿Por qué crear esta elaborada ficción de luto y llanto por multitudes que Dios sabe que no sólo rechazarán arrepentirse sino que, a menos que Él los regenere, no pueden arrepentirse debido a su incapacidad total para hacerlo?” (p. 107)
“Tome una comprensión humana de ‘muerto’, mézclela con la comprensión inmadura de la Palabra de Dios por parte del joven Juan Calvino, contaminada con filosofía agustiniana, agítelo todo y obtendrá la teoría de la Depravación Total” (p. 119).

“Sí, el hombre es totalmente incapaz de contribuir ni un ápice a su salvación. Sin embargo, no se puede deducir entonces que no puede recibir por tanto la salvación ofrecida gratuitamente en Cristo” (p. 121).
“Está claro que el Calvinismo descansa sobre una opinión errada de lo que significa para Dios ser soberano. …El problema básico del calvinista es el fracaso en ver que Dios pudo soberanamente dar al hombre la potestad de la elección genuina… Darle al hombre la potestad de hacer una elección genuina e independiente no disminuye el control de Dios sobre Su universo. Siendo omnipotente y omnisciente, Dios puede arreglar las circunstancias de modo que impida que la rebelión del hombre frustre Sus propósitos. De hecho, Dios puede e incluso usa el libre albedrío del hombre para ayudarle a cumplir Sus propios planes y así ser glorificado aun más” (pp. 128,129).

“Sugerir que a Dios le faltaría ‘potestad’ (y así Su soberanía sería negada) si El hiciera una oferta genuina de salvación y algunos la rechazaran, es enmarcar erróneamente la proposición. La potestad no tiene ninguna relación con la gracia y el amor, que proveen la salvación. De hecho, como veremos, hay muchas cosas que Dios no puede hacer, y una falta de ‘potestad’ no es la razón para alguna de ellas, ni tampoco Su soberanía es mitigada en lo más mínimo” (p. 136).

“¡No se puede escapar del hecho de que en todos los Institutos de la Religión Cristiana de Calvino no hay ninguna mención del amor de Dios por los perdidos!” (p. 151).
“Así que una vez más, en lugar de ver a los hombres, sin importar cuán grande sea su reputación, somos conducidos a llegar a nuestras propias conclusiones sobre la base de la Escritura sola” (p. 162).
“Por supuesto que la salvación no es obra nuestra; pero que no podamos ganar la salvación no demuestra que no podemos escoger libremente recibir la salvación como un regalo del amor de Dios” (p. 182).
“…en contraste con los literalmente cientos de lugares donde el amor de Dios está expresado claramente para todo Israel (la mayoría de los cuales lo rechazaron) y para el mundo entero (la mayoría de los cuales también lo rechazan), en ninguna parte la Biblia declara que Dios no ama y no desea la salvación de todos” (p. 206).

“La soberanía de Dios no sería socavada más si algunos aceptaran la oferta de salvación y otros la rechazaran que si billones de humanos desobedezcan continuamente los Diez Mandamientos” (p. 206).
“Además, ¿no sería una deformación de la peor clase ofrecer la salvación a todo aquel que quiera, cuando en realidad estaba destinada solamente para unos pocos elegidos? …afirmar que “todos” significa sólo un grupo selecto llamado los elegidos violenta el significado llano del lenguaje e impugna el carácter de Dios; y esto lo hace con el fin de forzar sobre la Palabra de Dios un sistema de religión que no puede derivarse de ella” (p. 208).

“Una de las tristes características de los Institutos de Calvino es el lenguaje degradante que emplea continuamente (muy parecido a Lutero) para difamar a todos aquellos que no están de acuerdo con él” (p. 233).
“No hay manera en la que la muerte de Cristo pudiera limitarse a pagar sólo por los pecados de los escogidos. Para salvar incluso a una persona del castigo eterno, sin importar si hubiera cometido pocos o muchos pecados, Cristo tuvo que pagar la pena por el pecado exigida por Su justicia infinita. Por definición misma, entonces, la muerte de Cristo en la Cruz pagó la pena por el pecado mismo que cuelga sobre las cabezas de toda la raza humana” (p. 251).
“Trágicamente, la tergiversación de Dios por parte del Calvinismo ha causado que muchos se alejen del Dios de la Biblia como si lo hicieran de un monstruo” (p. 287).
“Ciertamente, así como Dios mismo no puede forzar a nadie a amarlo (una respuesta coaccionada es lo contrario al amor), así también sería todo lo contrario a la gracia forzar cualquier regalo o beneficio de ‘gracia’ sobre alguien que no quisiera recibirlo” (p. 291)
“Dios cierta y poderosamente obra dentro del creyente y no podemos hacer nada sin la dirección y el poder del Espíritu Santo. Al mismo tiempo, sin embargo, debemos entregarnos gustosamente a la obra de Dios a través de nosotros. La mayoría de los calvinistas admiten este esfuerzo cooperativo cuando se trata de vivir la vida cristiana, pero insisten que no puede haber tal disposición en creer el Evangelio y aceptar a Cristo” (p. 298).

“Sin duda, la desobediencia continua de los incrédulos y de los creyentes demuestra que la gracia de Dios no es “irresistible”. Ni tampoco la desobediencia del hombre disminuye la soberanía de Dios en lo más mínimo. Obviamente, ¡la libertad de elección en sí misma es parte del plan de Dios!”
(p. 299).
“Si Pablo no quería que ni un solo judío fuera al infierno y estaba en agonía constante del alma por su salvación, dispuesto incluso a ser maldecido por Dios si eso podría salvar a sus “parientes según la carne” (Rom. 9:1-3), ¿sería Dios, quien seguramente puso este amor desinteresado en el corazón de Pablo, menos amoroso y estaría menos preocupado por la humanidad perdida en camino al infierno? ¡Ciertamente no el Dios de la Biblia! …¿Pudo haber estado equivocado Pablo en su continua agonía por las ovejas perdidas de la casa de Israel (y de hecho todos los hombres) y Calvino en lo correcto en su falta de preocupación por los perdidos?” (pp. 301, 302).
“…mi firme desacuerdo con el Calvinismo no es acerca de la soberanía de Dios, la cual abrazo completamente y a la cual me someto. La cuestión es si Dios ama a todos sin acepción y si desea que todos sean salvos. Indiscutiblemente, el Calvinismo niega tal amor; pero la Biblia, en el lenguaje más claro declara repetidamente el amor de Dios hacia todos y Su deseo de que todos sean salvos y que ninguno perezca” (pp. 301, 302).
“Consideramos que el acrónimo TULIP es un libelo contra nuestro amante y misericordioso Dios tal como se revela a Sí mismo tanto en Su Palabra como en la conciencia humana” (p. 304).
“El hecho mismo que Pablo, Apolos y los otros evangelistas primitivos hayan empleado tanto tiempo y energía en persuadir a los hombres para que creyeran el Evangelio es completamente contrario a los conceptos de Depravación Total y Gracia Irresistible” (p. 324)
“…El calvinista audazmente ha cambiado la palabra ‘mundo’ para que signifique ‘elegidos’ en no menos de veinte escrituras. Ha cambiado ‘todo aquel’ y ‘todos’ a ‘elegidos’ al menos dieciséis veces cada uno. Además, la frase ‘todo hombre’ ha sido cambiada a ‘elegidos’ seis veces y ‘cada uno’ a ‘elegidos’ tres veces. En todos los casos en donde estos cambios han sido hechos, no hay nada en el texto que justifique a ‘elegidos’ como el significado de la palabra por la cual debe ser sustituido. El cambio ha sido hecho por una sola razón: ¡para dar cabida al Calvinismo! (p. 332).
“Naturalmente nadie busca al Señor; todos nosotros buscamos nuestros propios deseos egoístas y nadie puede venir a Cristo a menos que el Padre lo atraiga. Pero el Espíritu Santo está en el mundo para convencer a todos de su pecado y necesidad (Juan 16:8-11), el Evangelio está siendo predicado, el Padre está atrayendo a todo el mundo (incluso a través del testimonio de la creación y la conciencia)” (p. 339).
“¿Por qué la gracia irresistible de Dios, que es tan poderosa hacia los pecadores, no crea vidas perfectamente obedientes después que los pecadores han sido salvados?” (p. 354)
“¿Quién diría que el hombre puede llegar a Dios ‘sin la ayuda’ del Espíritu Santo? ¡Ni siquiera el arminiano más flagrante! Pero el Calvinismo hace esa falsa acusación contra aquellos que no están de acuerdo con su extremismo” (p. 369).
“Además, es absurdo sugerir que recibir un regalo significa que lo merecemos. …Un hombre que se está ahogando que se rinde en las manos de su rescatador no tiene nada de qué jactarse, ni tampoco ha hecho ninguna obra para ayudar en su rescate. De igual forma es con el pecador perdido” (p. 370).